Me dio un ataque de asma y tuve que acudir al hospital más cercano. Deambulé por los edificios del lugar, comunicándome por señas. Finalmente pude darme a entender con dos simpáticas estudiantes de medicina que hablaban inglés. Trajeron a un doctor malhumorado que ordenó que me pusieran una inyección de corticoides; aseveraba que estaría bien en una hora (ambos sabíamos que no era cierto). Tratando de empatizar con él le conté del bombardeo de poemas que habíamos realizado poco antes. Al final le pedí a las estudiantes que me tradujeran las indicaciones que escribió en un recetario: aconsejaba que fuera al médico en Chile y que dejara de practicar deportes de riesgo. Tuve que volver en la tarde y una doctora muy atenta me recetó un inhalador. Era una señora de unos 50 años, me puse tan feliz que le di un abrazo al despedirme. Ella se apartó rápidamente, asustada por mi sangre latina.
viernes, octubre 30, 2009
miércoles, octubre 28, 2009
lunes, octubre 26, 2009
Gagarin
Yuri Gagarin descendió a Tierra en Siberia, lanzándose en paracaídas desde la Vostok I, que fue a dar a un campo cercano a la localidad de Saratov. Según figura en sus memorias, una mujer y una niñita de seis años se acercaron un tanto temerosas por lo extraño de su traje de cosmonauta.
- "¿Será posible que venga usted del Cosmos?" (le preguntó la mujer).
- "Pues imagínese, de allí vengo".
Los cosmonautas son pernos (perno: chilenismo que significa torpe, simplón, nerd).
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