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Me convertí en un saco de nervios entre febrero y marzo de 2005. Siguiendo instrucciones de mi abogado, que también es mi amigo, grabé varias veces el comercial a medida que aparecía en la radio.
Cuando empezó a aparecer en TV me puse a mirar programas de animales en el cable y cosas por el estilo para captarlo en video digital. A veces estaba una hora mirando un estelar y justo cuando iba al baño tiraban el comercial. Los hijos de puta lo sacaban al aire cada una hora aproximadamente.
Aprendí de esa manera que el comercial salía exactamente a la misma hora todos los días en la radio. Las apariciones en TV eran más azarosas, no sabía bien en qué programa, las veía en uno y después en otro. También aprendí que la exposición por más de 15 minutos a esos programas que son para toda la familia, produce náuseas, mal carácter y enajenación. Estaba por volverme loco.
No podía mandar cartas a la prensa ni hacer público el plagio porque mi abogado me había dicho que los abogados de
Lan Chile pagan por evitar el daño, o sea que si se hacía público, les dejaría de interesar el asunto.
Hasta que otro abogado experto en derechos de autor le dijo a mi abogado que no le veía mucho destino judicial al caso. Estas eran sus razones:
1. La publicidad hace parodias de canciones constantemente
2. Era difícil acreditar un perjuicio significativo, dado que los muebles no tienen una imagen pública que se haya visto dañada.
3. se requiere que exista un daño que se pueda valorar económicamente.
4. lan chile recibe miles de cartas distintos artistas todo el tiempo, y muy pocos concretan sus amenazas de ir a tribunales.
Estas son mis respuestas:
1. No se puede parodiar una canción antes de que se haya hecho pública
2. ¿Imagen pública de los muebles? Cualquiera que nos haya escuchado va a pensar que hacemos música a partir de los comerciales.
3. no sé qué responder a eso.
4. razón de más para entablar demanda.
Estaba atado de manos. No hice ningún movimiento por no contradecir a mi abogado. Pensé que estaba trabajando en el caso y cuando me di cuenta de que no era así, ya era tarde. Eso me pasa por mezlcar el trabajo con los amigos. El mecánico de mi auto también es amigo mío y no alcanzo a manejar dos cuadras antes de quedar en pana. Siempre va a ser así; es que los amigos también son amigos al fin y al cabo; están para ayudarte y para cagarla también, de otro modo no serían amigos.
En todo caso el saldo no es malo. Ahora tenemos todo el tiempo del mundo para comenzar una guerra fría contra Lan Chile. Publicarlo en este blog es un primer paso.