jueves, octubre 22, 2009

ingeniería aeroespacial


Los ingenieros norteamericanos se quebraban la cabeza tratando de tomar notas en el espacio, debido a que la ausencia de gravedad impide bajar la tinta de los lápices. Al no hallar solución, preguntaron a sus colegas rusos cómo habían resuelto este dilema. La respuesta: utilizando lápiz grafito. La anécdota me fue referida en 2002 por el candidato a cosmonauta chileno Klaus Von Storch.

1 comentario:

minicomic dijo...

.. me recordaste un viejo chiste polaco
- ¡los rusos se fueron al espacio!
- ¡óoorale! ¡¿todos?!

uff. había tantos.