lunes, abril 28, 2008

623. tres historias de hospitales

Hace dos o tres años un amigo llegó al Hospital Salvador con un ojo casi saliéndosele de la órbita por un ataque de alergia. Le pidieron que pagara 12 mil pesos por atenderlo, él tenía 10.500, y pidió dejar esa cantidad más un reloj y sus documentos en prenda. Le contestaron que no. Por suerte otro amigo que vive cerca llegó con los mil quinientos pesos que faltaban a los 15 minutos. Y eso que es un hospital público.

Una vez otro amigo llegó a la clínica INDISA con la pierna fracturada. Se demoraron tanto en atenderlo que cuando le tocó el turno ya era de noche. Le exigieron dinero; y como a esa hora estaba cerrado el cajero automático de la clínica (cosa que le impedía sacar la suma requerida), le pidieron que se retirara con la pata colgando hasta el día siguiente.

Yo también tengo historias. Hace cuatro años acompañé a mi madre a la clínica Santa María. Pregunté cuánto valía la consulta de urgencia, me dijeron que 32 lucas. Después de atenderla cobraron 260 lucas porque habían tenido que suturarla.

23 comentarios:

Anónimo dijo...

Tres historias injustas y tristes. LLegar a un hospital, desvalido y sin dinero... Al menos, tu madre te tenía a su lado (es la primera vez que mencionas a tu madre)... suerte la de ella.

Te abrazo,
obvio.

la vieja de al lado dijo...

Yo no los llamaría hospitales. Los nombraría centros de comercialización de la salud.

También he tenido historias en estos lugares. La última vez que llevé a mi hijo a la Clínica Santa María le hicieron una ecotomagría abdominal. Yo pensé que el doctor había visto algo que yo no había notado en mi niño (lo llevé porque tenía fiebre, le dolía la garganta y vomitaba: o sea amigdalitis) así que dejé que se la hicieran. Después de mucho esperar en Urgencia, me explica el doctor que al niño le iba a dar una diarrea fulminante y que la ecotomagría era para descartar una apendicitis. Y yo con mi cara de asombro le dije: Doctor, ¿usted cuando examinó al niño no le vío la cicatriz que le atraviesa la guata? Lo operaron de apendicitis cuando tenía 2 años, casi se murió.

Aparte del costo de la famosa ecotografía, sumarle el valor de urgencia en día inhabil (era domingo). Y de la diarréa ni en sueños.

No exigí explicación, pero nunca nunca - nunca - nunca más voy a esa Clínica, y cada vez que puedo cuento esta misma historia.

Anónimo dijo...

Ecotomografía, así se escribe, me tupí 3 veces.

Yo

Anónimo dijo...

ése es el problema, tú elegiste no pedir una explicación, pero en los hospitales públicos ni a una explicación se tiene derecho... al menos algunos podemos dejar de optar por ir algunos lugares, en lo personal he oído de casos desastrosos e incluso fatales en varias clínicas como la alemana, la tabancura, la indisa, asi que ya no sé si es posible encontrar un lugar mejor que otro. Al final el problema es de confianza, porque tenemos un sistema de salud que piensa con una logica extraña, comercial, fría y despreocupda, muy lejana a la lógica de la protección que todos quisiéramos tener cuando nuestra salud o la de alguien querido por nosotros está en riesgo.

la vieja de al lado dijo...

A bueno, es que cuando me pasó esa situación que conté anteriormente yo no estaba bien y mi paciencia no me daba para además entrar a discutir con la clínica, pero sí me cambié a otra, que debo decir puedo ir a la atención privada porque tenemos un seguro de salud, de lo contrario, ni pensarlo. Y como dices, después de esta clínica no sé a cual voy a ir el día en que me decepcionen.

Anónimo dijo...

directo al cementerio.

Anónimo dijo...

¿Germán Ignacio?

Anónimo dijo...

frío frío frío

Anónimo dijo...

¿Julio Ignacio?

Anónimo dijo...

frío frío

Julio Iván.

Anónimo dijo...

William Blake mi vida no tiene sentido
mi vida entera no tiene sentido
me da tristeza decirlo
una tristeza que me duele hasta los huesos
como el frío frío frío
de no saber quién eres
y yo escribiéndole a un desconocido

sola sola sola

Cristina Chain / Tijeras Turkas dijo...

malayo,que curioso, resulta que hoy un amigo mío llegó de baires muy enfermo. cuando llegué a verlo,estaba tirado en su cama, apenas respiraba, apenas hablaba.
Llamé a mi padre que es doctor y me dijo que por los síntomas el tipo podía tener una pancreatitis de aquellas...podía agravarse demasiado.
Su madre (Sara) ubicó a otro familiar que nos ayudara a ver un servicio de urgencia que no estuviera colapsado, un consultorio obviamente y llegamos a uno increiblemente desocupado , muy bueno, le pusieron suero, le volvieron los colores.
Yo no sé si nos ayudó San Benito no sé,
tampoco sé si le cobraron porque su padre me vino a dejar antes ya que le quedaba una hora de suero...pero lo más seguro es que le cobren luka.
no sé si aqui entran anónimos con fonasa pero lo voy a decir, ojalá que con el dato no colapse ese servicio, es el Rosita Renard, el de Las Encinas.

Anónimo dijo...

pero si tienes ISAPRE y vas a un hospital de la red de salud pública también te sacan el ojo de la cara, asi que ojo por ojo, diente por diente.

Todos cooperamos.

Anónimo dijo...

yo te voy a decir quien es

Gabriel Ignacio.

¿te sirve de algo?

Anónimo dijo...

Carolina:
Yo busco entender la poesía, porque deseo pensar lo que tú piensas, hablar lo que tú hablas, sentir lo que tú sientes; penetrar en ese misterioso santuario en donde a veces se refugia tu alma y cuyo umbral no puede traspasar la mía.

Nicanor (no soy WB, soy más desconocido)

Anónimo dijo...

qué imbécil eres Nicanor!




Carolina (soy yo)

Anónimo dijo...

Maraca Ignacio?

Anónimo dijo...

caliente caliente caliente?

Anónimo dijo...

anda a correrte una paja saco de gueas, dile a malayo que te preste el confort!

Anónimo dijo...

malayo, tantos siglos sin saber de tus escritos y demás.

sabes que yo he tenido siempre buenas experiencias con el sistema publico de salud, obvio que sé que estas historias que cuentas existen y son terribles, pero en mi caso mi parto fue buenisimo y no pagué ni uno en un hospital publico, mi hermano que tiene diabetes es atendido super y la otra vez tuvo una emergenncia y 0 atado y mi mejor amiga que vivió tres años en Italia (tiene qué comparar) no tiene ningun pero con el sistema publico de salud chileno, es más, pensaba cambiarse a una isapre pero se arrepintió. Yo sé qué hay casos y casos, reconozco los errores y que la salud privada es un negocio, ufff pero hay cosas buenas que no se dicen, así que a decirlas también

saludos
pachi

Anónimo dijo...

Estas historias penosas de los hospitales, la pastillita abortiva, la provoste, la pata de la guagua y la cacha de la espada son todas lo mismo: POLITICA, manipulaciones políticas, no ven que estamos en época de elecciones y no pasa nada de nada, hay que reunir gente sea como sea, aunque sea que salgan a la calle a gritar estupideces.


igual te quiero Malayo.


Juan

Anónimo dijo...

No entiendo por qué la gente no se dedica a hacer lo que sabe hacer bien.

Haber puesto la pastilla abortiva directamente a la venta y ya!

Anónimo dijo...

uy sí hubiera sido buena para que muchos de los que hacen tonteras no estén aquí ni en ninguna parte
(ironía)