miércoles, febrero 27, 2008

573. devorador de papas fritas

Por aquellos días vivía solo en mi depto de Alamar. Mi hermano el rata había conseguido trabajo en el agro mercado. Era un puesto apetecido porque te permitía hacer mucho dinero en poco tiempo alterando la pesa, robando verduras y vendiéndolas en el mercado negro. Una vez por semana iba a verlo al agro, él empezaba a alegar que recién había pasado por ahí no sé cuál amigo y lo había dejado sin yuca (es otro tubérculo, muy bueno), que no sé quién se había llevado 3 kilos de malangas, que lo íbamos a poner en problemas. Metiéndome la mano al bolsillo hacía el ademán de pagar; el rata empezaba su discurso de “deja eso mi socio, no es necesario, no te preocupes”. Entonces sacaba la mano del bolsillo, le dejaba una moneda de un centavo y me iba con las bolsas llenas. En ese momento el rata me sacaba la madre y juraba que era la última vez que me lo permitía. Pero la escena se repetía semana tras semana.

Nunca comí tanta papa como entonces. Sacos. Cada vez me hacía una olla entera de papas fritas, siempre me quedaban bien. Me emborrachaba día por medio, con escándalo; tenía una buena chica que me cuidaba y se encargaba de que amaneciera en mi cama cuando perdía la conciencia. Mi única preocupación era la fecha de mi vuelo a Chile que se acercaba inexorablemente. También había un paco obsesionado conmigo que era un verdadero adelantado del ranking de los hijos de puta; parecía salido de una película de los hermanos Cohen. Llegó al extremo de tomar de rehén a mi novia la noche previa a mi partida. Creo que las papas fritas son una de las pocas cosas que sé cocinar, aunque tiempo después traté de hacer y me quedaron blandas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

mmm... qué buena que es la yuca frita.

Anónimo dijo...

No te creo que hayas sido devorador de papas fritas, tendrías huellas de obesidad....

¿Qué buena chica te iba a cuidar borracho escandaloso perdido?

¿Cuándo has visto las películas de los Cohen? dime tú ah?

cínico, mentiroso nomá

Anónimo dijo...

¿malayo, no querías venirte a Chile?

De acuerdo a la vida que describes haber tenido en Cuba creo que el cambio te favoreció.

Drogas, alcohol, papas fritas y chicas piadosas no eran una buena combinación para nadie...

yus dijo...

hacer buenas papas fritas no es cosa fácil... es un don con el q no fui bendecida.

en cambio, nací con una olla de arroz graneado bajo el brazo.